jueves, 15 de junio de 2017

Día de la Bandera.



PROMESA DE LEALTAD A LA
BANDERA NACIONAL ARGENTINA

Esta es la bandera que creó Manuel Belgrano en los despertares de nuestra libertad. Simboliza a la Republica Argentina, nuestra Patria. Es el símbolo de los valores que nuestros próceres defendieron y promovieron con sus luchas y sacrificios, triunfos y derrotas. Esos valores son los de la libertad, la tolerancia, la justicia, la igualdad, la paz y la solidaridad. Es el sentido de nuestra libre soberanía, que hace sagrados a los hombres y mujeres y a todos los pueblos del mundo. Convoca al ejercicio de nuestros deberes y nuestros derechos, a respetar las leyes y las instituciones. Es la expresión de nuestra historia forjada con la esperanza y el esfuerzo de millones de hombres y mujeres, los que nacieron en nuestra tierra y los que vinieron a poblarla al amparo de nuestra Bandera y nuestra Constitución.
Representa nuestra tierra y nuestros mares, nuestros ríos y bosques, nuestros llanos y montañas, el esfuerzo de sus habitantes, sus sueños y realizaciones.
Simboliza nuestro presente, en el que, día a día, debemos construir la democracia que nos ennoblece y conquistar el conocimiento que nos libera, y nuestro futuro, el de nuestros hijos y el de las sucesivas generaciones de argentinos. Es el símbolo que con sus colores celeste y blanco nos identifica como argentinos ante el mundo.

Alumnos:
¿Prometen defenderla, respetarla y amarla, con fraterna tolerancia y respeto, estudiando con firme voluntad, comprometiéndose a ser ciudadanos libres y justos, aceptando solidariamente en sus diferencias a todos los que pueblan nuestro suelo y transmitiendo, en todos y cada uno de nuestros actos, sus valores permanentes e irrenunciables?

- ¡SI PROMETO!





Especial 20 de junio.

Recordamos a Manuel Belgrano.



Manuel Belgrano nació un 3 de junio de 1770 1770 en Buenos Aires (Argentina). Cursó estudios de derecho en España. En el año 1794 pasa a ser secretario del Consulado de Buenos Aires, cargo desde el que fomentó firmemente la generalización de la enseñanza y las reformas económicas. En 1810 formó parte de los patriotas que pretendían la emancipación del dominio español en Argentina, y se convirtió en miembro de la junta de gobierno revolucionaria. Fue nombrado general, y pronto dirigió a las tropas independentistas frente a los realistas, logrando importantes victorias en las batallas de Tucumán (1812) y Salta (1813) frente a Juan Pío de Tristán y Moscoso. En los últimos meses de 1813, los españoles en el Alto Perú (ahora Bolivia) le vencieron, y en 1814 pasó el mando al general José de San Martín. Desde este momento se dedicó a la diplomacia y a la mediación en las disputas políticas surgidas tras proclamarse la independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata en el Congreso de Tucumán (1816). 1812. Ideó una escarapela con los colores celeste y blanco, como distintivo para los soldados. El 27 de febrero, con esos mismos colores, creó la bandera que más tarde fue adoptada como Bandera Nacional. El 20 de Junio, aniversario de su fallecimiento, ha sido decretado "Día de la Bandera" como homenaje de la patria al creador de su emblema nacional.

Otros sitios para consultar.

http://www.me.gov.ar/efeme/3dejunio/

Instituto Nacional Belgraniano.

http://manuelbelgrano.gov.ar/




jueves, 1 de junio de 2017

EL ORIGEN DE LA LLUVIA



   Dicen que dicen los abuelos sabios, que en los primeros tiempos, el gran chacú, el cual no era el lugar de caza, había tanta agua que no se podían vislumbrar los montes, ni los bosques, pues el hacedor de todo lo creado, habíale dado vida a un hombre de agua cuyo cuerpo acuoso inundaba todo el lugar con sólo pasearse por aquellas tierras, su nombre era el hombre Lluvia.

   Lluvia solía divertirse invitando a otros a fiestas, en las que se bailaba, comía y bebía hasta altas horas de la madrugada, no había día que no organizara una reunión en pos de la diversión.
   Cierta vez, lluvia conoció a Tokjuaj, un héroe del pueblo Wichi.
   Cuentan que Lluvia invitó a Tokjuaj a divertirse con ellos, pero Lluvia tenía una mala costumbre, la de no ser generoso con sus invitados y omitió convidar comida y bebida a Tokjuaj, por lo que el héroe se enojó sobremanera y le recrimino a Lluvia por su mala actitud, Lluvia que ya había bebido bastante trató de agredir a Tokjuaj y se trabó en lucha, pero Tokjuaj era más fuerte y ganó la contienda, no sin antes advertirle a Lluvia sobre su proceder, además, le echó en cara que siempre andaba por ahí inundándolo todo, y le hizo prometer que eso ya no debía suceder más.
   Lluvia estaba enojadísimo, corrió y corrió hasta refugiarse en la cima de un cerro.
   Allí medito su accionar, sabiéndose culpable decidió dar un salto liberador y trepó al cielo donde se quedó a vivir para siempre.
   Por cierto ya no hubo más inundaciones en el gran Chaco, pero cada vez que Lluvia llora extrañando su antigua morada, sus lágrimas caen sobre la tierra, es lo que conocemos como lluvia.
   También, quienes le conocen, dicen que por estos días Lluvia suele viajar de estrella en estrella para no aburrirse, pero cuando su tristeza lo supera emite unos fuertes gritos, tan pero tan fuertes que retumban sobre la tierra y nosotros conocemos como truenos, y desde allí arriba, la temerosa mirada de Lluvia se asoma entre las nubes para vislumbrar su añorada pacha y verla mejor, entonces alumbra con sus potentes ojos, eso es lo que hoy conocemos como relámpagos.


adaptación Susana C. Otero